Esta receta requiere de un secreto de cerdo ibérico de calidad, la idea es que casi se funda en el paladar cuando se deguste, dejando en él, además del sabor de la carne veteada, el de los cítricos, salsas, especias y aceites con los que se elabora. Como es de esperar, el Secreto de cerdo ibérico macerado con lima, trufa y aceite de oliva de Alberto Chicote tiene toque orientales.