¿Sabíais que no existe ninguna legislación que obligue a las empresas a revelar los ingredientes usados en sus productos de salud menstrual? No hay ninguna norma específica a nivel estatal que regule la composición, fabricación o uso de los mismos, lo que hace que sea prácticamente imposible para nosotras, consumidoras, saber qué tipo de químicos se encuentran en las compresas, tampones y protegeslips que usamos.
