Por caprichos de la vida, LOLA se queda sin hogar. Es una perrita de casi cuatro años, tiene las vacunas al día. Su carácter es encantador, tranquila, cariñosa y alegre, le agrada que la minen y es muy friolera, pero ahora está muy triste y necesita un hogar para siempre.Está acostumbrada a convivir con otros animales incluidos gatos.Es un poco revoltosa cuando sale a la calle, y con extraños también. Pero es causa de su carácter inquisitivo.Queremos evitar que termine en Valle Colino,