De la curiosidad, desde luego. De la curiosidad que surge cuando te das cuenta de que estás repitiendo patrón, de que tu vida es una sucesión de la misma experiencia una y otra vez. De la curiosidad que surge al mirar a tu alrededor y ver que cada uno tenemos una película distinta. De querer saber de donde surge esa película. De que nos hemos contado y de cómo hemos interpretado lo que realmente nos pasó. De la curiosidad que da ver que si haces algo en lo invisible, cambia tu mundo visible.